Negocio Familiar: Viviendas de lujo (L’Agence) – Serie Netflix – Una entretenida propuesta francesa que sabe combinar la vida familiar y el negocio inmobiliario

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Negocio familiar: Viviendas de lujo (L’Agence) es una serie de Netflix que nos presenta a una familia francesa y su negocio inmobiliario en el centro de París. El título no engaña a nadie, por lo que, si nos acercamos a esta propuesta, encontraremos precisamente eso, visitas a casas de lujo (castillo incluido) y la vida personal de una entrañable familia. Hablamos de cinco episodios en los que vemos el día a día de todos los miembros, mientras intentan sacar a flote su negocio familiar, con todo lo que ello conlleva. Y la verdad es que dan en la diana, ya que seguramente estemos ante el mejor show en lo que a género inmobiliario se refiere.

Quizás la duración de los episodios tendría que haber sido menor (las producciones de estas características no suelen sobrepasar los cuarenta minutos), ya que una hora se nota excesiva, aunque no se puede negar que los cinco capítulos no se hacen pesados y se pasan rápido, siendo una propuesta amena, interesante y que entretiene (atención al episodio de Ibiza, una maravilla), gracias al carisma y cercanía de sus protagonistas. Curiosamente, los padres son los menos interesantes de la función, por mucho que sean los que manejan los hilos, siendo los auténticos protagonistas los dos hijos mayores, Martin y Valentin.

Ambos mueven la serie con soltura y buen hacer, ganándose la simpatía del espectador. No olvidar al tercero en discordia (el hijo mediano), el cual protagoniza uno de los episodios, pero poco más, esperando que tenga más protagonismo en futuras entregas (si es que las hay, que espero que sí), o la curiosa abuela, ajena al negocio, pero a la que le dedican algunos momentos. Y es que todos tienen algo qué decir o aportar, siendo un conjunto que funciona.

Ya adelanto que si alguien se acerca a esta serie esperando solamente visitas a las casas de lujo, quizás se lleve una decepción, porque aquí también hay espacio para la vida en familia de sus personajes, como si de una ficción se tratase, con algunos giros más propios de ese formato que no de una producción de telerrealidad. Eso sí, que nadie se lleve a equívoco, ya que se nota que hay muchos momentos guionizados, pero es lo esperado, ya que se busca entretener al público que se acerque a ella, y os confirmo que se consigue holgadamente.

A pesar de que se notan los movimientos para que todo fluya, no se puede negar la naturalidad de sus protagonistas, notándose que hay momentos que ni ellos se esperan (o son actores excelentes, que también puede ser), otorgando más autenticidad al conjunto, al contrario que otros productos similares, donde se nota todo más impostado.

Y es que eso es precisamente lo que hace destacar a Negocio familiar, siendo una opción perfecta para los adictos a este tipo de producciones sobre el mundo inmobiliario (me declaro culpable), pero con el aliciente de presentar a unos personajes de carne y hueso, por los que te preocupas y que caen bien, haciendo suyo el show y logrando que no eches de menos cuando están inmersos en la visita de una casa o cerrando una venta. Una producción diferente y satisfactoria, que deja buenas sensaciones y con ganas de más. Seguramente sea la mejor del género, renunciando a la toxicidad de otras propuestas (como Selling Sunset), lo que acaba siendo todo un acierto. Una opción más que recomendable si te atrae este mundo y tienes interés en una ciudad tan maravillosa como París (la Torre Eiffel es otra gran protagonista). Una delicia.

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